En esta entrada os explicaré cuáles son los pasos necesarios para optimizar vuestro entreno.
El objetivo es claro, adecuar el plan de trabajo para no sobreentrenar ni entrenar en vano.
En anteriores entradas hablamos de la alimentación, ahora... ¿cómo debes entrenar?
1. Determinar nuestro estado físico
Lo mejor es acudir a un especialista, pero si no, es fácil. Mide tu frecuencia cardiaca y comprueba que tus valores fisiológicos son normales. Con esto empezamos:
- ¿Cuál es tu estado físico actual? Malo, regular, normal, bueno, muy bueno, óptimo.
- ¿Cuál es tu pretensión? Mantenerte, tener un buen nivel, competir.
- Tipo de ejercicio. Aeróbico, anaeróbico (musculación), de esfuerzo intenso, de resistencia.
- Tiempo disponible. Hay que conjuntar el tiempo con el ejercicio para obtener resulatado y determinar retos para no decaer en el entreno.
2. Elección del deporte o deportes. Si no es un entrenamiento específico para competición es muy positiva la variación, así como el deporte en equipo.
3. Jornadas. Entrando en materia:
- una persona que quiere un mantenimiento, para evitar la oxidación, tiene suficiente con dos o tres días semanales de un ejercicio variado a intensidad media. Correr, gimnasio, bici, deportes en grupo.
-Para tener un nivel bueno necesitamos más de 4 días con intensidades medias y fuertes y donde haya predominancia de un deporte elegido. Si el ejercicio no tiene apoyos (tipo correr) una hora aprox, si está asistido (bici) entre 2 y 3 horas. Hay ejercicios asistidos que requieren de un gran esfuerzo, como el remo, aquí establecemos los valores de los no asistidos.
-Competición: este nivel óptimo requiere de dedicación plena, también de descanso regulado. Depende del deporte, pero rara vez baja de las 4 horas diarias. Con descansos activos de una vez por semana.
En conclusión, ten paciencia. Si estás en lo más bajo y quieres llegar arriba. Date tiempo, comprueba la mejoría y, adelante!
Alberto Fernández Ruidíaz
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